El FC Barcelona sacó su alma de guerrero en
Alemania para remontar un partido que se le había puesto cuesta
arriba. Los de Luis Enrique controlaron
la posesión de la pelota en todo momento pero se encontraron con un gol en
contra inesperado en el primer tiempo. Los cambios hechos por el técnico
gijonés ayudaron a los catalanes
para hacerle más daño al Borussia Mönchengladbach y conseguir darle
la vuelta al marcador.
Sorprendía
"Lucho" saliendo con Paco Alcácer y Luis Suárez de inicio, optanto por tanto por un dibujo táctico diferente al de
siempre. Los blaugranas jugaban con un 4-3-1-2 con el valenciano y el
uruguayo como delanteros avanzados y un Neymar Júnior más agazapado en la mediapunta, tirándose a
ambas bandas y tratando de conectar con sus compañeros. Y las primeras ocasiones
fueron de un Barça al que se le veía que necesitaba practicar esa nueva
disposición sobre el terreno de juego pues ni Iniesta ni "Ney" conseguían conectar de buena manera con
Suárez ni Paquito Alcácer.
Hazard anoto primero y Luis repondió con los cambios a
tiempo
Después de los primeros veinte minutos tenía el nueve
azulgrana la más clara tras cazar dentro del área un buen pase de Rakitic que a
la espalda de la defensa rival. Sin embargo, el disparo era despejado por
Sommer y Alcácer no alcanzaba a llegar al rechace. Si bien los de Schubert
habían salido con las líneas muy adelantadas, presionando a su rival, no había
tenido una ocasión clara hasta el gol. Este llegó en el 32' tras una pérdida de
Busquets. Raffael le robaba la bola para dársela a Dahoud dentro del área, el
alemán centraba rasa al corazón de ésta donde aparecía Thorgen Hazard para
romper las tablas.
Jarro de agua fría para Luis Enrique y sus muchachos que se
iban a vestuarios sin haber podido hacerle el daño necesario a la defensa rival.
Después de varios minutos del comienzo del segundo tiempo, el técnico azulgrana
daba por concluída la participación de Alcácer, que dejaba su sitio para que
entrase Rafinha. Poco después era Arda el que hacía lo mismo con Ivan Rakitic,
lo que sería clave para el devenir del encuentro. Con el otomano sobre el
verde, al Barça se le vio con mucho más carácter y creando mucho peligro. En
una de éstas, Neymar se vestía de orfebre para imaginar y crear una asistencia
espectacular por encima de la defensa del Borussia al que llegó Arda, que
dentro del área pequeña fusiló a Sommer.
Piqué aprovecha y certifica la remontada que le dará el
liderato al Fc Barcelona.
La felicidad era absoluta para el equipo blaugrana que tras
encontrar puerta se veía convencido de conseguir los tres puntos. Y así fue
después de varios intentos cuando Neymar ejecutó una jugada estratégica desde
el córner. El brasileño la puso rasa a la frontal del área donde Suárez enchufó
un disparo potente y al medio que el cancerbero suizo despejó, sin embargo el
balón quedó muerto para que Gerard Piqué lo luchase y acabase metiéndolo dentro
de la portería. El central se iba a la grada donde estaban los aficionados
culés para celebrarlo con ellos. Se hacía justicia en Borussia-Park.
Tras el tanto, los blaugranas dominaron todo el partido y no
se dejaron sorprender pues no hay que destacar ninguna jugada clara de estos
ante la meta de Ter Stegen. El portero alemán sólo tuvo que intervenir en un
par de centros que no llevaron peligro real a la puerta. Rafinha entendía el
partido y ayudaba en banda derecha en defensa para crear peligro también en
ataque mientras que Neymar le daba la pausa al partido y dos de sus pases a
punto estuvieron en convertirse en el tercer de Luis Suárez. Sin embargo, este
tanto no llegó pero Skomina señalaba el final del encuentro. Tres puntos
sufridos y merecidos para el Barça que con el empate entre Celtic y Machester
City en el otro partido del grupo C les deja como líderes en solitario con seis
puntos.
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