Oswaldo Vizcarrondo no pudo terminar el partido del pasado jueves en Barranquilla, pero ya en suelo merideño conversó con los medios y aseguró que está apto para jugar, por lo que Rafael Dudamel tendrá un dolor de cabeza menos al momento de armar el once para enfrentar a Argentina, pues el sector defensivo de la Vinotinto presenta tres bajas de peso: Wilker Ángel (central), Rolf Feltscher (lateral izquierdo) y Arquímedes Figuera (volante de contención).
“A nivel de salud ya me siento bastante bien, luego del balonazo traté en la medida de lo posible de mantenerme en el partido para no gastar un cambio en un jugador defensivo, pero me sentí desorbitado en el momento, incluso hasta dos horas después del partido seguía con el malestar; sin embargo ahora, como dije, me siento bastante bien, apto para poder sumar al grupo”, explicó el zaguero en la zona mixta del Metropolitano de Mérida, después de un entrenamiento presenciado por unas cinco mil personas el viernes cuando caía la noche.
Ese respaldo fue reconocido por Vizcarrondo en el momento en que se le preguntó su opinión sobre Mérida como casa de la selección: “Esta sede siempre ha sido una buena opción, por ser una ciudad futbolera, de gente amable, vendrán a apoyarnos y hoy (viernes) fue un reflejo de eso. Ojalá que les podamos regalar una victoria, no solo a Mérida sino a todo el país”.
Y el vinotinto más experimentado también compartió su reflexión sobre el presente del equipo nacional y lo que fue la derrota ante Colombia (2-0). “No estamos en la posición que quisiéramos, me parece injusto para el grupo que tenemos, pero es nuestra cruel realidad y tenemos que afrontarla. Ahora nos toca enfrentar al actual líder de la eliminatoria y hay que hacerlo de mejor manera que como se hizo ante Colombia, que se sostuvo un buen primer tiempo, no de mucha calidad técnica, pero sí compitiendo, ya en la segunda mitad decaímos, nos hicimos un equipo largo, el factor climático también afectó… pero bueno, aquí estamos, tratando de revertir esta situación con un resultado positivo, como el que ya conseguimos la eliminatoria pasada contra esta selección”, apuntó Vizca, con un guiño a lo que fue esa victoria 1-0 de 2011 en Puerto La Cruz, la primera y única de Venezuela sobre la albiceleste.
“Si existiera una receta para conseguir las victorias siempre fuéramos ganadores, lastimosamente no la hay, estamos tratando de buscar el camino más corto para ser un grupo ganador y victorioso y darle alegrías al país como las que le dimos en el pasado, pero ya no podemos vivir de esas”, agregó el defensor, que fue uno de los 14 protagonistas de la gesta de hace cinco años. Hoy ni Vizca ni sus compañeros encuentran explicaciones para el mal momento de la Vinotinto en el premundial: un solo punto luego de siete fechas, cuando la media para clasificar está sobre los 25.
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